La Bota 28 de Oloroso «Bota Punta»

Saca de marzo de 2011
D.O. Jerez-Xérès-Sherry
21% alc.
Edición limitada a 900 botellas de 37,5 cl
Bodega: Rey Fernando de Castilla. Jerez de la Frontera

28p

Fernando de Castilla es una casa jerezana impulsada por Jan Pettersen que ilustra como pocas la renovación de los vinos y brandies tradicionales andaluces en los últimos años del siglo XX y los primeros del siglo XXI. En sus bodegas del barrio de Santiago alberga una admirable solera de oloroso que transmite la autenticidad de los antiguos olorosos jerezanos. Compuesta por una larga veintena de vasijas, entre ellas destaca una “bota punta” de antología, ubicada en el extremo izquierdo de la andana.

Es común en las bodegas tradicionales de Andalucía que la bota situada en el extremo de una andana o un cachón («bota punta» o «bota de punta») adquiera con el tiempo un carácter singular frente a sus compañeras de solera o de criadera. A veces, sobre todo en escalas de finos y manzanillas, se debe a que, por la  facilidad con que se accede a esta vasija, se la «toca» más a menudo con la venencia para catar u ofrecer a las visitas. O puede tratarse sencillamente de que la peculiar ubicación dentro del edificio bodeguero, posiblemente con mejor acceso a la oxigenación y con cambios de temperatura y humedad más acusados que sus compañeras de andana, confiera a la bota de punta un carácter especial.

Otras veces se trata de una decisión consciente del capataz o el responsable técnico. En efecto, es costumbre en ciertas bodegas que, después de cada saca, la bota punta de la solera no se rocíe con vino procedente de la primera criadera, sino procedente del resto de botas de la misma solera. De ello resulta un carácter más intenso y concentrado del vino de la bota punta, el cual se añade al conjunto en la proporción necesaria para mantener el estilo de la casa, cada vez que se realiza una saca.

Sea como sea, no puede atribuirse a la casualidad el que, en la excepcional solera de oloroso viejo de Bodegas Rey Fernando de Castilla, sea el vino contenido en la bota punta el que descuelle por una rara combinación de sensualidad y hondura.

La Bota de Oloroso 28 «BOTA PUNTA» debe servirse a 16ºC, en copa más bien amplia que favorezca el elegante elegante despliegue de sus aromas en toda su complejidad. En particular, desaconsejamos usar copitas y catavinos de pequeño tamaño que impedirían apreciar los interminables matices aromáticos de este tesoro jerezano.

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